Nuestro cuerpo físico necesita energía. Nuestras
almas también, pero no la energía que se obtiene de los alimentos. Ciertamente
todas las almas contamos con energía.
La mayoría de las veces dentro nuestro… las
energías que existen no son muy limpias, la mayoría de las veces nuestra
energía está contaminada y esto nos limita, nos condiciona y nos ata a vivir y
experimentar situaciones karmicas, de dolor.
No hay píldora, jarabes, medicinas exteriores para
transformar estas energías.
Tratamiento y cura es la meditación, un voltear
hacia dentro, tomar conciencia, estar alerta de los egos y demonios que habitan
en el interior, ellos que se roban tu energía cada vez que dispersas tu
atención al exterior, cada vez que apagas la conciencia. Y este es todo el
secreto: obsérvalos, al observarlos se irán porque tomar conciencia significa
encenderte por dentro y ellos no toleran la luz.
Entre más alerta estés, entre mas vayas
recuperando el control de tu interior, entre más integrado te encuentres…
gradualmente iras viendo que: la ira, la pereza, la indecisión, la
esquizofrenia, la frustración, los apegos, la soberbia, la culpa y todos los
paquetes karmicos comienzan a desaparecer.
Aprovecha ahora que estas en la materia para
transformar esas energías que te limitan, porque todo lo que te limita o te
libera no está afuera, está adentro de ti. Dentro es ir a la raíz y armonizarte.
Hacer pequeños cambios o arreglos a tu vida en el
exterior, es como construir castillos de arena en el cielo.
Aprovecha hoy que tienes tiempo, no mañana ni
ayer. Quizás hoy sea el día decisivo, quizás hoy sea el día que te hartes de
toda la basura interna y decidas poner un fin definitivo, quizás a partir de
hoy te encomiendes en embellecerte en tu interior.
No pensemos que estamos en perfectas condiciones,
no creamos que nosotros no tenemos karma, ni deudas, ni egos, ni nada negativo…
si así lo fuera, no estaríamos habitando en esta plataforma de curación, en
este hospital llamado Tierra.
El sufrimiento y el placer son opcionales, vive en
medio de ambas y podrás trascenderlo todo. Vive en medio en todas las
situaciones, de pronto tu energía no estará más involucrada, de pronto te
sentirás mas integrado, de pronto tendrás mas el control de tu interior, de
pronto el karma comienza a disminuir y comenzaras a probar un poco que es la
verdadera vida.
Tener signos vitales, nos indica que tu cuerpo
físico está vivo, pero ¿Y tu alma? ¿Está realmente participando en tu vida? ¿Le
das papel protagónico o prefieres oprimirla y sufrir indefinidamente por todo
tipo de situaciones?
En cuanto tu alma sea la protagonista, ahí comenzaras
a probar un poco que es la verdadera vida, pero no antes. Medita, Observa, Experimenta, Ríete de tus
errores, Comprende y sigue Adelante.
Y disfruta este juego llamado vida, porque a pesar
de lo anteriormente citado, inclusive eso es también un juego, pero juega
sabiéndote las reglas para gozar el juego.
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